TÍTULO: Mimí Ardú se convirtió en mujer policía para no irse de la Argentina
PERIODISTA: Luli Morena
FUENTE: Revista Semanario
FECHA: 2002
Como muchas actrices, Mimí Ardú comenzó el 2002 con un claro proyecto: irse del país. Sus valijas estaban armadas y su departamento en venta. Estaba por sacar el pasaje cuando un llamado telefónico cambio sus planes. "Quise irme del país en enero, pero no pude vender el departamento por el corralito. Me iba a ir a Costa Rica, donde estuve y descubrí mucha paz y oportunidades concretas de trabajo. Allá estoy
vigente porque estan pasando la tira "Cebollitas" y "Cara bonita" donde participe", explica.
Cansada de esperar ofertas de trabajo con continuidad y de ir sin éxito a todos los castings, el viaje le prometía un lugar en la televisión costarriqueña "El día que puse el aviso para vender el departamento, me llamó un amigo periodista para avisarme del casting para trabajar en el film "El bonaerense". La actriz seleccionada renunció y me llamaron a mí. Un día, a las ocho de la noche fuí al casting. Tenía la mente en otro lado, armando cajas, juntando platos, porque ya no tenía confianza: hay productoras que arman castings para mostrarle a los productores que trabajaron mucho pero tienen a las actrices elegidas", cuenta.
Pero cuando el director de la película "El bonaerense" la llamó a su casa el 23 de enero antes de la medianoche, colció a creer: "Fuí al casting súper relajada, muy segura. Tuve que hablar sobre las drogas y cualquier verdura, e hice una escena con el protagonista Jorge Roman". Esa mismo noche Trapero le dijo por teléfono: "Mimí bienvenida a la bonaerense".
Mimí tuvo que transformarse en una mujer policía y cambiar su imagen: nada de brushing ni uñas postizas ni maquillaje. "Mabel, una subinspectora de la Bonaerense, es profesora de los aspirantes a policía. Tiene un nivel muy interesante, cuarente y pico de años y una vida sexual intensa: sale con aspirantes y tiene una relación con el protagonista. El papel me exige desnudos totales y escenas de sexo subidas de tono. Para mí es nuevo. Antes represente morochas con cara de loca pero producidas."
Pablo Trapero, el joven cineasta prestigiado por su film "Mundo Grúa", muestra en esta producción la historia del protagonista, Jorge Roman, que llega de la provincia y se deja llevar por la vida. "Muestra cosas de la actualidad, hasta filmo un piquete. El clima de trabajo es fabuloso, abunda la buena onda y siento que estoy en una isla, porque encima me pagan." dice Mimí.
No niega que todavía lucha contra el fantasma de la represión. "Cargo con muchos dolores, muchas historias y la muerte de mi marido, que no voy a superar nunca. Pero soy actriz porque tengo esa realidad dramática".
Mimí trabajó en novelas ("Antonella", "Señoras y señores" y otras) y en obras de teatro ("Mi suegra esta loca").
PERIODISTA: Luli Morena
FUENTE: Revista Semanario
FECHA: 2002
Como muchas actrices, Mimí Ardú comenzó el 2002 con un claro proyecto: irse del país. Sus valijas estaban armadas y su departamento en venta. Estaba por sacar el pasaje cuando un llamado telefónico cambio sus planes. "Quise irme del país en enero, pero no pude vender el departamento por el corralito. Me iba a ir a Costa Rica, donde estuve y descubrí mucha paz y oportunidades concretas de trabajo. Allá estoy
vigente porque estan pasando la tira "Cebollitas" y "Cara bonita" donde participe", explica.
Cansada de esperar ofertas de trabajo con continuidad y de ir sin éxito a todos los castings, el viaje le prometía un lugar en la televisión costarriqueña "El día que puse el aviso para vender el departamento, me llamó un amigo periodista para avisarme del casting para trabajar en el film "El bonaerense". La actriz seleccionada renunció y me llamaron a mí. Un día, a las ocho de la noche fuí al casting. Tenía la mente en otro lado, armando cajas, juntando platos, porque ya no tenía confianza: hay productoras que arman castings para mostrarle a los productores que trabajaron mucho pero tienen a las actrices elegidas", cuenta.
Pero cuando el director de la película "El bonaerense" la llamó a su casa el 23 de enero antes de la medianoche, colció a creer: "Fuí al casting súper relajada, muy segura. Tuve que hablar sobre las drogas y cualquier verdura, e hice una escena con el protagonista Jorge Roman". Esa mismo noche Trapero le dijo por teléfono: "Mimí bienvenida a la bonaerense".
Mimí tuvo que transformarse en una mujer policía y cambiar su imagen: nada de brushing ni uñas postizas ni maquillaje. "Mabel, una subinspectora de la Bonaerense, es profesora de los aspirantes a policía. Tiene un nivel muy interesante, cuarente y pico de años y una vida sexual intensa: sale con aspirantes y tiene una relación con el protagonista. El papel me exige desnudos totales y escenas de sexo subidas de tono. Para mí es nuevo. Antes represente morochas con cara de loca pero producidas."
Pablo Trapero, el joven cineasta prestigiado por su film "Mundo Grúa", muestra en esta producción la historia del protagonista, Jorge Roman, que llega de la provincia y se deja llevar por la vida. "Muestra cosas de la actualidad, hasta filmo un piquete. El clima de trabajo es fabuloso, abunda la buena onda y siento que estoy en una isla, porque encima me pagan." dice Mimí.
No niega que todavía lucha contra el fantasma de la represión. "Cargo con muchos dolores, muchas historias y la muerte de mi marido, que no voy a superar nunca. Pero soy actriz porque tengo esa realidad dramática".
Mimí trabajó en novelas ("Antonella", "Señoras y señores" y otras) y en obras de teatro ("Mi suegra esta loca").
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