
TÍTULO: La venganza de Mimí Ardú
FUENTE: Diario La Razón
FUENTE: Diario La Razón
FECHA: Buenos Aires, 15 noviembre 2006
LINK: http://www.larazon.com.ar/notas/2006/11/15/01309998.html
LINK: http://www.larazon.com.ar/notas/2006/11/15/01309998.html
UNA MUJER LIBRE Y SIN COMPROMISOS
La venganza de Mimí Ardú
Tiene mucho trabajo en cine. Dice que, luego de haber relegado su profesión por entregarse a amar, llegó el tiempo de pensar sólo en ella. "Toda la libido la deposito en el laburo, nada más. Ni mascota tengo", asegura.
La venganza de Mimí Ardú
Tiene mucho trabajo en cine. Dice que, luego de haber relegado su profesión por entregarse a amar, llegó el tiempo de pensar sólo en ella. "Toda la libido la deposito en el laburo, nada más. Ni mascota tengo", asegura.
El sol raja la tierra en la calle Concordia del barrio Villa del Parque. En un ómnibus, esperando hacer la escena truculenta de un nuevo capítulo de "Mujeres asesinas", Mimí Ardú recibe a La Razón luciendo una sobria blusa negra que se le pega a la húmeda piel. Observarla transporta a aquellos fogosos pasajes de "El bonaerense", el film de Pablo Trapero que la resucitó, que la llenó de premios y la devolvió a una vidriera perdida hacía tiempo. Tratar a Mimí borra cualquier tipo de fantasía y permite encontrarse con una madraza, justamente ella, una mujer que no es madre.La madurez le sienta bien y hoy atraviesa un período laboral fructífero. A su ansiado debut en "Mujeres asesinas" (estuvo varias veces a punto, pero siempre se "pinchaba"), donde hará de amante de Norman Briski en el capítulo "Pilar, esposa", se le suma el reciente final del film "El pasado", de Héctor Babenco y con Gael García Bernal, donde personifica a una ricachona que mantiene tórridas escenas con un joven personal-trainer. Además, está sumergida en el rodaje de "Mujeres elefantes", un telefilm (se verá en Canal 7) dirigido por Adrián Caetano y José María Muscari, cuyo rol será el de una ninfómana. "Me encanta, me sale bien", susurra traviesa. También esta rodando "El partenaire", opera prima de Rubén Estrella, donde hace a una profesora de danzas. Por si fuera poco, espera el estreno de "El destino", de Miguel Pereira, y allí es una enfermera de pueblo que mantiene un affaire con un "cura trucho".
¿Esta avalancha de trabajo es una forma para no pensar en algo puntual?
Mirá, me decidí a poner toda la libido en el trabajo. Ya no busco armar un hogar y tengo en claro que no tendré hijos... Tampoco lo lamento, creo que si no se dio es porque no estaba preparada.
¿Es como la venganza de Mimí?
Algo así (se ríe). Yo le presté mucha atención a armar una pareja y formar una familia. Resigné mis inquietudes, postergué mi profesión y me dediqué a ser esposa (del ex futbolista José Miguel Marín, con quien vivió en México hasta 1991, cuando el deportista murió por un infarto masivo).
Pretendientes no deben faltarte...
Sí, me falta lo que necesito. Yo quiero a alguien pasional, sensato, generoso, que me cuide y que respete mi trabajo. Lo que se me acerca es banal, aburrido, sin sorpresas. Igual, ya está, ya me relajé, ahora pienso en mí, soy más individualista. Claro que eso tiene un precio, el precio de estar sola. Pero amo no tener que rendirle cuentas a nadie. Ni mascota quiero...
Ardú es una mujer accesible, terrenal, sin posturas preestablecidas ni con el casete puesto... Aspectos en extinción entre los actores de cabotaje. Es de las que llama para reconfirmar una entrevista o avisar que está demorada sin utilizar intermediarios. Y de las que cuenta, sin sonrojarse, que viaja en "bondi", que no tiene cable, o que su línea telefónica tiene un cupo limitado. "Como no sé la frecuencia laboral, vivo austeramente".
Cómo... ¿tanto trabajo no se condice con el aspecto económico?
(Más risas.) No, para nada. Justamente ése es un aspecto que quiero mejorar. Yo siempre cobré chauchas, y si bien actuar es un laburo que me encanta, necesito mayor holgura salarial.
Y el bien ponderado prestigio, ¿pasa a un segundo plano?
Con el prestigio no pagás las expensas. No obstante, en mis prioridades, el dinero está por debajo y creo que eso está mal.
Mimí, sin manifestarse quejosa, cuenta que está incursionando en la faceta de guionista... "Como nadie me llama para un protagónico, estoy escribiendo mi propia historia, con un personaje soñado, del que puedo decir poco, sólo que haré a una cantante que actúa en una whiskería de cuarta en un pueblo de morondanga".
¿Sentís que sos presa de tu cuerpo en el plano actoral?
No, yo he hecho de todo, los papeles no se repiten, aunque es verdad que invito a que se me tenga en cuenta para personajes fuertes. Y la gente los recuerda.
¿Hubieras hechos escenas tan jugadas como las de "El bonaerense" si tuvieras marido e hijos?
Supongo que no, no estoy segura. Hubiera sido difícil. Habría pensado en mis hijos que van a la escuela, o en el trabajo de mi marido... Por eso las hago ahora, porque no tengo que dar explicaciones. Tuve, hace unos años, a alguien violento, que me celaba mucho y no se bancaba mi profesión. ¡Basta! Ya fue...
¿Es complicado ser pareja tuya?
Imagino que no debe ser fácil. Pienso en un supuesto compañero mío viendo, así porque sí, las escenas de "El bonaerense"... ¡Se muere, pobre! Si hasta a mí me dan pudor...
No hay comentarios:
Publicar un comentario